The end - 30 de septiembre de 2022 / Sevilla - Murcia (en autobús)
A las 6:30 h me levanto y empiezo a organizar el equipaje, aunque anoche ya deje muchas cosas preparadas, hoy solo tengo que ultimar los pequeños detalles. Subo a la cocina para ver si puedo desayunar, ya sé que la hora de los desayunos empieza a las 7:30 h, y todavía faltan treinta minutos, pero la persona que está preparándolos me dice que ya puedo desayunar, después de tomar un par de cafés con leche y algo de repostería, bajo a la habitación y hecho el último vistazo.
Sobre las 7:15 h salgo del albergue con destino a la estación de autobuses, ahora toca quitar las alforjas y el resto de equipaje y meterlo todo en una bolsa de grandes dimensiones, la bicicleta la pliego y la envuelvo con plástico. Ya todo preparado espero a que llegue el autobús.
A las 7:50 h llega el autobús y después de identificarme y mostrar el billete el conductor me dice dónde meter el equipaje, ahora hay que esperar unos minutos a que sea la hora de emprender la marcha.
A las 8:00 h todos estamos ya subidos en el autobús, el chofer, después de comunicarnos las normas de viaje: hay que llevar en todo momento la mascarilla, ponerse los cinturones y un montón de cosas más, arranca motores y salimos de la estación con destino a Almería, aquí tendré que hacer trasbordo hasta Murcia.
El viaje en el autobús es más que agotador, para en un montón de localidades, en las cuales no podemos bajar ni para ir al aseo y eso que el autobús no lleva váter, ¡es increíble! Las paradas en estas localidades son solo de escasos minutos para bajar y subir pasajeros, aunque el conductor no tiene más remedio que permitir bajar a algunos pasajeros para ir al aseo.
Después de casi siete horas de insufrible autobús paramos en la estación de Motril donde el conductor nos deja media hora (de 14:30 h a 15:00 h) para que podamos comer, y nos dice que esta parada no está programada, que la hace por su cuenta, porque piensa que tenemos que comer, cosa que le agradecemos.
Aprovecho para ir al aseo y en el bar pedir una cerveza y un bocata de jamón con queso, me sorprende que con la cerveza me sirven un plato de albóndigas en salsa, le digo al camarero que yo he pedido un bocata de jamón y este me dice que sí, pero que las albóndigas es la tapa que ponen con la cerveza. Después de tomarme las albóndigas con la cerveza, le pido al camarero que me envuelva el bocata para tomar más tarde.
De vuelta en el autobús nos ponemos en marcha y ahora aguantamos el tirón más de hora y media hasta llegar a Almería, donde termina la primera parte del viaje. Una vez en la estación de Almería bajo la bici y resto de equipaje, pregunto desde donde sale el autobús para Murcia y me dicen que desde la dársena 19, coloco todos los cacharros en dicha dársena y a esperar que salga el bus.
Mientras tanto no puedo moverme del equipaje para nada, solo cuando tengo que ir al aseo pido ayuda al guarda de seguridad y este me dice que no tarde mucho que él no está para estas cosas, de vuelta le doy las gracias y sigo junto a mis cosas.
Aquí tengo que estar hasta la 17:50 h que llega el autobús y después de que el conductor revisara mi billete, me dice donde tengo que poner la bici y el resto de equipaje y subo al autobús. A las 18:00 h en punto sale de la estación con destino a Murcia, eso sí, paramos en un montón de poblaciones antes de llegar a Murcia.
Ya más que harto del autobús y después de trece horas llegamos a Murcia a las 21:35 h, aquí me espera Rosa, bajo la bici y la bolsa con el resto de cosas y las llevamos a mi coche, ya todo en el maletero arranco motores y llegamos a casa, pero esto no acaba aquí, ahora tengo que sacar todo y subirlo a casa, bueno menos la bici que la dejo en su garaje, mañana o cuando pueda la desempaquetaré.
Una vez en casa y mucho más relajado doy por finalizada la EuroVelo1, no sin antes dejar mi opinión sobre la misma.
Lo primero que me llama la atención es el propio nombre de esta ruta “Ruta de la Costa Atlántica”, me parece increíble que se cruce España de norte a sur por el centro del país y que la costa atlántica lo más cerca que queda es a cientos de kilómetros.
En cuanto a la señalización, solamente decir que, salvo algunos pocos tramos donde la señalización es perfecta, en el resto de tramos es muy, muy deficiente. Cuando más falta hace ver las señales es cuando no consigues verlas y cuando no las necesitas porque vas siguiendo el Camino de Santiago, la Senda del Duero, Canal de Castilla, Vía de la Plata… entonces es cuando junto a estas señales también ves una señal EuroVelo1
En cuanto a los desniveles me sorprende ver los que he tenido que superar, en ocasiones empujando la bici y en otras teniendo que quitar las alforjas y resto de equipaje para poder superar unos desniveles que hasta el más experto en BTT le costaría superar. Y esto no ha sido en una ocasión, ha sido en muchas ocasiones.
Del firme de algunos caminos y sendas mejor no hablar, hay muchos tramos que no son ciclables, pues lo mismo pedaleas por tramos de bancos de arena, qué con piedras sueltas o con unas escorrentías tremendas y esto en condiciones secas, no quiero pensar el día que llueva y estos caminos se embarren.
Bueno, no quiero polemizar con este tema, solamente pediría a los servicios técnicos de EuroVelo1 que revisen y hagan más ciclable la ruta.
También deciros que después de catorce días tomando notas y haciendo fotos de todo lo que he visto, ahora llega el momento de darle forma a estas notas e ir casándolas con las imágenes para que resulte una crónica más o menos amena y de fácil lectura.
Por último, comentar que esto ha sido posible gracias a que he estado unas cuantas noches dedicado a esta labor, y por supuesto acompañado por una buena taza de café
No hay comentarios:
Publicar un comentario