Ruta en bicicleta entre el nacimiento del Río Ebro en Fontibre (Santander) y su desembocadura en Deltebre (Tarragona) + Regreso a Murcia
Alojamiento:
Albergue de peregrinos “Santos Mártires”
Viaje en Autobús - Domingo 10 de septiembre
A las 6:30 h de la mañana, me levanto y me tomo un café con leche. El equipaje y la bicicleta ya los coloqué, anoche en el coche. Una vez todo controlado, Rosa me lleva a la estación, donde espero unos minutos la llegada del autobús. Coloco la bicicleta y el resto de bártulos en la bodega del bus. A las 7:15 h, según lo programado, el autobús sale de Murcia. Hacemos paradas en Alicante, Benidorm, Valencia y Monreal del Campo. Esta última es la única parada en la que nos permiten descender, para comer.
Reemprendemos el viaje, pasando por Logroño, Vitoria y Bilbao. Aquí nos vemos forzados a esperar casi dos horas debido a las intensas lluvias. Llamo al albergue de peregrinos para decir que llegaré más tarde de lo previsto debido al mal tiempo. La hospitalera me dice que no me preocupe y que, al llegar, solo debo tocar el timbre para que me abran.
Finalmente, alrededor de las 22:45 h, llego a Santander. Mientras descargo todo mi equipaje y la bicicleta del autobús, ya son casi las 23:15 h. Cuando llego al albergue llamo al timbre y la hospitalera me recibe.
En el albergue, preparo una sopa y un café con leche, acompañados de unas galletas ofrecidas por la hospitalera. Aquí todos duermen. Con el frontal encendido, arreglo mi cama y en la cocina escribo estas notas mientras disfruto de otro café.
Día de Descanso en Santander - lunes 11 de septiembre
Son casi las 7:00 h y el silencio reina en el albergue. Me sorprende la ausencia de los típicos sonidos de bolsas y cremalleras que suelen acompañar a los peregrinos. Decido levantarme y darme una ducha. Hablo con la hospitalera para ver si puedo quedarme un día adicional, pues ayer fue un día agotador. Me dice que sin ningún problema, solo con la condición de que desocupe el albergue a las 8:00 h y regrese alrededor de las 13:00 h.
Desayuno y a las 8:00 h en punto salgo del albergue junto al resto de peregrinos, aquí dejo todo el equipaje. Salgo en bicicleta a recorrer la ciudad, visitando los lugares más representativos como El Sardinero, La Magdalena, el Faro Cabo Mayor, la catedral y el Centro Botín.
El día ha estado marcado por una fina lluvia. Alrededor de las 13:00 h regreso al albergue, organizo mis bártulos y disfruto de una comida junto al mar seguida de una reparadora siesta.
Por la tarde, sin bicicleta, salgo a patear la ciudad. Al regresar al albergue, me encuentro tremendamente agotado. Me preparo la cena, que doy buena cuenta de ella, y ya más relajado, preparo un café y mientras lo saboreo, escribo estas notas.
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