13ª Etapa – 19 de junio de 2021 – Tábara – Rionegro del Puente (51,14km)
Poblaciones por las que paso:
Santa Croya de Tera
Pumarejo de Tera
Calzadilla de Tera
Olleros de Tera
Villar de Farfón
Rionegro del Puente
Alojamiento:
Albergue municipal “Virgen de la Carballeda”
Datos de la etapa:
Km. etapa: 51,14
Km. total: 960,66
Tiempo en movimiento: 4h 59m
Velocidad media: 12,1km/h
Velocidad máxima: 28,2km/h
Desnivel acumulado + 310 m
Desnivel acumulado – 247 m
Altitud máxima: 859 m
Altitud mínima: 732 m
Frecuencia cardiaca media: 107ppm
Frecuencia cardiaca máxima: 139ppm
Sobre las 6:30h me levanto y empiezo a organizar las alforjas, Pedro no tarta mucho en levantarse y organiza su equipaje, una vez todo más o menos preparado bajamos al comedor a desayunar, después nos acercamos al garaje donde tenemos las bicis y las llevamos a la puerta del hotel, bajamos las alforjas y el resto de equipaje y lo colocamos en la bici.
Aquí coincidimos con otro bicigrino, que también está preparándose para empezar la etapa, hablamos de cómo salir de la población y le digo que nosotros iremos por carretera, ya que lo normal es que el camino esté embarrado por la lluvia de ayer, nos comenta que el también hará lo mismo.
Una vez nos hemos despedido empezamos la etapa por el camino, justo lo contrario que le hemos dicho al bicigrino, no ha sido por nada, sino porque nos hemos liado a la hora de salir. El camino no está tan embarrado como se podía pensar, con lo que no contábamos es con la cantidad de piedras sueltas, esto hace que el pedaleo sea mucho más duro. Llegamos a Bercianos de Valverde donde recorremos la población viendo algunas bodegas excavadas en el suelo.
Seguimos la etapa pedaleando por el camino hasta cruzar el río Castrón donde nos despistamos y ahora no vamos siguiendo las flechas amarillas, lo hacemos por otro camino que va paralelo hasta llegar a Santa Croya de Tera, aquí recorremos la población y aprovechamos para comprar pan y otros vivieres, también nos tomamos un tentempié.
Continuamos pedaleando, ahora no seguimos las flechas amarillas, como siempre nos hemos liado y vamos por otro camino paralelo, pero igualmente llegamos a Calzadilla de Tera, aunque pasando por Pumarejo de Tera. En Calzadilla recorremos la población y sin parar seguimos pedaleando.
Hasta este momento se me ha salido la cadena en dos o tres ocasiones, incluso noto que no va bien y que salta cada vez que pedaleo con fuerza, es en Olleros de Tera donde por fin se parte la cadena y hay que parar, menos mal que me acompaña mi “fiel y leal escudero” que rápido y veloz cual tronchacadenas soluciona el problema. He tardado yo mucho más en desmontar y volver a montar las alforjas que Pedro en solucionar el problema.
Una vez solucionado el tema de la cadena seguimos rodando por el camino, qué en esta ocasión, como en otras muchas, está fatal, lleno de piedras sueltas y bancos de arena, ahora cruzamos el puente de la presa y bordeamos el embalse de Nuestra Señora del Agavanzal hasta llegar a Villar de Farfón y desde aquí hasta Rionegro del Puente
En Rionegro del Puente recorremos la población y paramos a tomar una cerveza, entre trago y trago vuelvo a llamar por teléfono a Monbuey y a Cernadilla para ver los albergues disponibles, ninguno me responde. El camarero nos dice que aquí sí que está abierto el albergue, es más, nos dice que entre sus camareras una de ellas es hospitalera del albergue. Después de hablarlo con Pedro decidimos quedarnos aquí. En este momento el camarero la llama para decirle que nos quedamos, el albergue esta frente al bar. Mientras nos tomamos la cerveza con unas tapas llega la chica y nos registra en el libro, nos cobra, nos sella la credencial y nos da las instrucciones pertinentes.
Ya alojados organizamos el equipaje y me doy una ducha, lavo la ropa y estando descansando aparece la hospitalera con otro peregrino, este nos comenta que ha llegado hasta Mombuey y que el albergue está cerrado y que no hay ningún otro tipo de alojamiento, ha tenido que retroceder hasta aquí.
Pedro y yo salimos a dar un paseo y visitar la población, también aprovechamos para tomarnos unas cervezas. De vuelta en el albergue charlamos con el otro peregrino, que es Cordobés, nos dice que se le ha partido el eje del pedalier y tiene que abandonar el camino y está esperando a su hermano que viene a recogerlo, después de despedirnos del peregrino, nos preparamos la cena y ya algo más relajados, Pedro se retira a dormir…
Yo me preparo un café y saboreándolo escribo estas notas.
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